Aprendiendo de la Vid: Creados para su gloria!
¿Te has preguntado para qué estás en este mundo?
o si eres cristiano tal vez te has preguntado varias veces: ¿qué quiere Dios de mi vida?
Encontraremos la respuesta en la parábola de la Vid verdadera en Juan 15:1-9.
Aquí tendremos las siguientes representaciones:
El Labrador: Dios Padre
La Vid: Cristo
Los Pámpanos: los cristianos
Uvas: frutos del cristiano
¿Cuál es mi propósito?
(v8)"En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto, y seáis así mis discípulos."
Dios quiere de nosotros mucho fruto.
Un pámpano sin fruto no tiene sentido, no es útil, no sirve.
"Todo pámpano que en mí no lleva fruto, lo quitará;..." (v2)
Dependemos de Cristo
Pero para poder dar fruto, el pámpano necesita estar unido a la Vid para que ella le provea de la sabia necesaria para cumplir con su propósito.
En otras palabras, si no conoces a Cristo como tu Salvador, si nunca le has pedido que perdone tus pecados y reine en tu vida, nunca podrás cumplir con el propósito para el que fuiste creado.
"...porque separados de mí nada podéis hacer." (v5)No importa la cantidad de cosas buenas que hayas hecho en tu vida, o estás en Cristo, o no le perteneces.
También vemos reflejada la dependencia que tiene el cristiano hacia Cristo.
" Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí."(v4)
El cristiano nunca podrá estar bien hasta que no esté en comunión con Cristo.
Cristianos: Pequeños Cristos
Otra cosa interesante a destacar, es que el pámpano tiene la misma naturaleza y la misma forma de la Vid. Se parece mucho, pero mientras la Vid es grande y fuerte, el pámpano es débil, y sus ramitas se pueden quebrar fácilmente.Esto habla de como los cristianos debemos buscar cada día de nuestras vidas parecernos más a Cristo.
Un cristiano que está cumpliendo con su propósito se parece cada vez más a Cristo.
"Pues para esto fuisteis llamados; porque también Cristo padeció por nosotros, dejándonos ejemplo, para que sigáis sus pisadas;" 1 Pedro 2:21
Dios hará que cumplas con tu propósito
Un pámpano que no da frutos, es porque probablemente se está secando y se está desperdiciando sabia en él.Si estamos unidos a la Vid, es porque tenemos el propósito de darle la gloria a Dios con nuestros frutos.
Un auto sin combustible no funciona para andar en él. Tal vez lo puedas usar para sentarte dentro, para escuchar música en su radio, pero no para el objetivo principal para el que fue creado.
De la misma forma un cristiano sin frutos no sirve para el propósito principal, más allá que pueda hacer muchas cosas.
¿Qué hace el Labrador con el pámpano que no lleva fruto?
" Todo pámpano que en mí no lleva fruto, lo quitará;..."(v2)
" El que en mí no permanece, será echado fuera como pámpano, y se secará; y los recogen, y los echan en el fuego, y arden." (v6)
El Labrador realiza una poda al pámpano sin frutos, lo deja con lo mínimo para que vuelva a brotar nuevamente y cumplir con su propósito.
Ese pámpano queda reducido a un tronquito de rama y de esta forma tendrá como una especie de reinicio.
Si cómo cristiano no estás dando frutos, Dios hará una poda en tu vida.
Hay cosas que a veces nos brindan seguridad y estabilidad a tal forma que se nos pueda pasar por la mente que ya no necesitamos a Dios. Tal vez un buen trabajo, un techo propio, tu esposo/a o novio/a, tus padres, etc.
En la poda Dios hará temblar tu suelo, hará que aquellas cosas que te brindan seguridad ya no sea tan así y que no tengas otra que volver a Dios.
¿Recuerdas la parábola del hijo pródigo?
Su estabilidad aparente estaba centrada en el dinero. Pero luego terminó deseando comer de la comida de los cerdos que cuidaba. Tocó fondo para entender que necesitaba volver a Dios.
Al cristiano que no cumple con su propósito Dios lo reducirá a tal punto que no le quede alternativa que volver a su Padre y allí brotar nuevamente.
Dejando nuestro YO a un lado y dejando que Dios sea el que brille en nosotros.
Mucho Fruto y más fruto
En nuestra vida cristiana nadie puede decir que ha llegado a la perfección, porque siempre necesitaremos estar creciendo.Tu no te puedes conformar con los frutos que estás dando, porque Dios quiere más frutos.
"...y todo aquel que lleva fruto, lo limpiará, para que lleve más fruto." (v2)
Dios no nos demanda esto de forma exigente sin proveer los medios, sino que nos brindará su cuidado y protección para que de esta forma podamos dar más frutos.
Nuestros frutos son para la gloria de Dios, y la gloria de Dios también en parte se da a conocer a través de nuestros frutos.
Nuestro Fruto
El fruto (uvas) es lo que el pámpano produce y no lo produce para si mismo, sino para el Labrador.Nuestro fruto, lo que producimos en nuestra vida, debe apuntar a dar gloria a Dios, hasta las cosas más simples y cotidianas.
"Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios." 1 Corintios 10:31
Este fruto no es lo que nos salva, sino que es la muestra visible de que estamos unidos a Cristo.
¿Cómo están tus frutos?
¿Estás cumpliendo con tu propósito?
Este artículo tiene varios conceptos extraídos del libro "El Vino Nuevo" de Andrew Murray. Se los recomiendo! 😁